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miércoles, 31 de julio de 2024

EN TU CUEVA.


Un refrán dice; como en casa, en ningún sitio...

Hogar dulce hogar. Lugar donde se respira vida. Donde reside el AMOR. En ocasiones te sientes bien recibido, acogido en casas extrañas. Pero jamás son como tu HOGAR.

Tu casa; la construyes tu con tus valores. Tus creencias, tus proyectos, ambiciones. Es tuya. Todos lo sentimos de igual modo. Nos agrada volver a nuestro refugio. Allí es donde somos nosotros mismos. Hacemos de nuestra estancia, lo más confortable posible.
En tu Hogar: INTENTARÁS LABRAR UN PORVENIR.

En el comienzo de nuestras vidas. En el vientre de la MADRE, ya no han echo formar parte de un HOGAR. Nuestra MADRE, es nuestro HOGAR.

Las MADRES; nos arropan, nos acunan, nos alimentan. NOS DAN NUESTRO PRIMER HOGAR. Un sitio, donde nos sentimos seguros y amados.

Durante nuestra estancia en este MUNDO, vamos pasando diferentes etapas. Y en todas, nos consuela sentir el calor del HOGAR.

Incluso un buen día, vas a formar el tuyo propio. Como cualquier ser humano, nos seduce la idea de agrandar el lugar. Otros pueden decidir formar su Cueva solos.
Sea cual sea la situación, siempre nos espera nuestro HOGAR.
Individualmente nos sugiere esa armonía, necesaría para vivir. En familía nos aporta otro tipo de ganancias. De todas formas será lo mejor para nosotros.
Es la idea. También se puede romper, no pasa nada. Lo superamos y somos capaces de empezar de nuevo. Solos, acompañados; no importa si nos sentimos en nuestro HOGAR.
Ahí nuestra confianza, libertad, experiencias se funden. Ahí, nuestros miedos, sufrimientos, se disipan.

La propia NATURALEZA, ofrece a sus habitantes HOGAR. La zona de confort, ha de significar PAZ.

Cuando no es posible, buscaremos construir en otro sitio. Nos veremos solos, hasta lograr nuestro objetivo. 

Tomemos nuestras propias iniciativas. Tu HOGAR eres tu. Tu formas parte de ti mismo. Estás en tu derecho de compartir o no. Donde seas FELIZ, allí es.

Si percibes disgusto, ese no es tu HOGAR. Elige, el mejor fuego. Te abrasas; huye.
Te sientes encerrado, escapa. 

Tu hogar no es una zulo, ni una cueva; simplemente es tu HOGAR. Donde placidamente vives tu.
 

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