BURGUÉS...

Es tan increíble, tanto...
Que acudas a una entrevista de trabajo; y te encuentres con la prepotencia de un vicioso carente de amor. Un empedernido inconformista. Una mezcla de capitalismo y machismo enmascarado.
Que necesitabas; una psicóloga, una amante, una sumisa, una qué.
Te diste por vencido. Porque me puse a tu altura, o quizás sobrepasé los límites establecidos.
Hasta cuándo?
Porqué debemos soportar las mujeres ese tipo de trato.
Se que te impresioné. Lo sentí. Se percibe cuando un hombre se siente acorralado.
Cuánta falsedad. Cuánta mala educación. Por mucho que seas un hombre con estudios. Que pena.
Hablar de otras cuidadoras, que dejan mucho que desear. Qué poca ética.
Qué crees que puedo llegar a pensar...
Las mujeres no somos inútiles. Quizás te creas superior. Y lo siento, pero te equivocas.
No dejaste de hablarme de tus problemas personales.
Eso es una entrevista de trabajo. NO.
No dejaste de hablar del feminismo.
Te quedaste a cuadros cuando te dije, que defendía algunas ideas.
Más que una entrevista, parecía una debate.
Y no sé que buscabas.
Pero estoy segura de que no a la cuidadora de tus TÍOS.
Seguramente si estuvieras seguro del bienestar de tu familia, te encantaría que alguien como yo; acudiera a su encuentro.
Una persona con mis valores, mi curriculum. No te interesa, pùes te hace parecer inválido.
Me da igual, cuántos libros has escrito, cuántas herencias has recibido. Todo te ha venido dado. Gracias a tus semejantes. Y no lo valoras.
El dinero nunca podrá superar el poder del AMOR.
No eres ningún erudito; eres un egoísta aprovechado.
Y por supuesto, tengo muy claro lo que valgo. Lo que soy. Mi gran experiencia.
Ni tu ni nadie va a dejarme por los suelos.
Mi dignidad, mi valor, mi educación; están por encima del hombre inmaduro. Necesitado, fracasado en su matrimonio. Ser ingrato. Busca en otros andurriales. No quieras convertir tu deseo en cuidados a personas con alguna dependencia.
A ver si eres tú el que está necesitado.
Mira a tu alrededor, tu mujer lo vio claro.
Por ese motivo escogiste a la más débil.
Lo siento por ella. Pues le va a tocar vivir malas experiencias.
Y no es por juzgar.
Aún así que te quede claro, con todo mis respetos. Que tu no eres más que YO.

LA CAROL EN EL CENTRO PSIQUIÁTRICO.

Por aquélla época; ingresar en un Centro Psiquiátrico, dejaba mucho que desear.
Las enfermedades relacionadas con la mente, no eran del todo bien estudiadas.
Se seguía un patrón genérico. Cualquier persona que era hospitalizada, lo tenía muy difícil para volver a salir.
A todos les administraban los mismos medicamentos. Las mismas terapias de choque. Las temidas corrientes eléctricas. Las contenciones. Las ataduras a las camas.
Cuánto fracaso clínico. Quedaba mucho por avanzar en los temas de SALUD MENTAL.
Imagino que todo tiene un proceso. Pero se cometieron tantas injusticias. Tanto daño.

Cualquier persona, que padeciera algún síntoma diferente al que la sociedad regía; era abandonado a su suerte. O más bien apartado de la sociedad, para vivir en muerte. Los patrones eran radicales. En mi opinión más de muchos eran diagnosticados erróneamente. Y más de alguno estaba en su pleno juicio, en libertad.; cometiendo más abusos de los permitidos. La alta sociedad tenía un poder absoluto. La Iglesia no digamos....
Tanto dolor enmascarado, debía tener su fin.
No voy a entrar en la vieja historia; sobre este tema. Pues es muy complicado.
Me quedo con el avance, que poco a poco se está logrando.
La Carol, fue tratada de manera violenta. Tan solo padecía una depresión. Pero la dejaron absolutamente anulada.

EXCURSIÓN.

Una mañana de domingo inolvidable.
Visita guiada por un buen conocedor de la naturaleza.
Descubrir rincones ajenos a mi conocimiento.
Sentir el sonido de las olas. Apreciar vistas increíbles.
Caminar por senderos, aprendiendo todo lo que se refiere a plantación autóctona.
Escuchar verdaderas incógnitas, en relación a los seres vivos que habitan a nuestro alrededor.
Mañana de sorpresas. De aventura, de calificación 10.
Sensación vivida, a través de un buen ser humano.
Enseñanzas tardías y a la vez curiosas.
No puedo estar más agradecida.
Una mañana así, será difícil de olvidar.
Y con eso me quedo...
Con la sencillez, la sensibilidad de la compañía de un experto.
Con su buen hacer. Con su protección. Con su paciencia.

GRACIAS.

RECTIFICAR ES DE SABIOS.

Quería pedir perdón; para aquellos hombres que son persona.
En mi último escrito; para nada quería mandar el mensaje, ni muchos menos generalizar, con respecto a los hombres.
Simplemente, me dirigía a esos que yo he particular he conocido.
No era mi intención hacer una especie de crítica, hacia el sexo opuesto.
Solo sentía hablar de lo que yo sentí en mi piel.
Espero subsanar el error.
Pido disculpas a todos esos hombres, grandes hombres. A esos buenos PADRES.
Que por suerte, sé que existen.

Sin más qué decir...

Espero haber rectificado.

GRACIAS.

INÚTIL.

No sé si por suerte o por desgracia; he descubierto lo insignificante del  hombre.

Lo más básico.  Sus necesidades , sus objetivos, sus demandas, su satisfacción.

Que quieren atraer a una pareja. NO; lo que quieren es protección.

Ellos necesitan saciar sus ansiedades. Sus ausencias, sus demandas.

Piden muy poco de antemano. Te quieren embaucar. Pero la realidad, es que se sienten tan solos.

Son tan inútiles; tanto...

Todos buscan amparo, que sepas escuchar, que les de apoyo.

Son tan pobres; no sientes emociones, no perciben la empatía, no visualizan la protección.

Siempre han sido, siempre serán cobardes. Todas las decisiones las tomamos nosotras.

Y qué equivocadas estamos.

Son hombres o NO?

Porque nos utilizan en sus fracasos. Porque nos ignoran. Porque nos buscan para pedir ayuda. Porque nos cuentan sus fracasos. Porqué.

Porque nos quieren hacer responsables.

Seguramente las mujeres solemos llevar las riendas.

Ya basta de menospreciar a otras.

Si tú lo quieres, y ella también; es cosa de dos.

No la juzgues.

Si pagas, es tu decisión.

No me muestres sus errores. Tú también los cometes. 

A mi modo de ver... Sois tal para cual.

Si os va bien, me alegro.

Me arrepiento de que los hombres me expliquen sus decadencias.

Pongan a parir a las mujeres.

Iros a la M.

Si una MUJER comete errores, si un HOMBRE hace lo mismo. Para mí no tiene razón de ser.

Me atasco cuando veo a hombres machistas. Y a mujeres sumisas. Me da igual que busquen.

Estoy hasta las narices; de oir que si una mujer se ofrece; es porque quiere algo a cambio.

Hasta las narices, de escuchar que si un hombre da un premio a una mujer; ella es una PUTA.

Si una mujer quiere satisfacer sus necesidades. Es.....

Dónde está el problema?

Radica simplemente, en el respeto.  En el saber que todos somos iguales.

Cuando una mujer pide un favor a su sexo opuesto. Se descifra que quiere algo a cambio; o que ofrece algo.

Se la tacha de aprovechada.

Mentes perversas.

Cuando un hombre pide lo mismo. La mujer se lo ofrece; y sin pedir nada a cambio.

La Mujer será generosa. Sin compromiso, sin atadura. 

Me habéis defraudado, todos. Todos los hombres que he conocido.

Y puedo asegurar, que he conocido a muchos. Todos buscan lo mismo. Es una pena. Aunque lo intenten disfrazar. Va en la misma línea.

SEXO.

LA CAROL INGRESA.

Llega el día tan temido. La Carol apenas percibe lo que a su alrededor se está tramando. Siempre ha confiado en los Señores. Se deja llevar. Pues no es capaz de articular palabra.
Lo único que tiene en mente es que tiene una HIJA.
Pero llega a dudar si es real. No sabe si ella ha parido con seguridad.
Puede que esa hija sea realmente de los AMOS.
Está tan confusa...
Los Señores; la convencen, la tranquilizan. Le dicen que todo va a ir bien. Que la van a llevar al Hospital. Necesita curarse. Y la Carol asiente, sin hablar.
No es capaz de tomar decisiones, no visualiza la realidad. Está totalmente hundida.
No pone ninguna resistencia. Llega una ambulancia. Dos camilleros de blanco, la sujetan, y ella no ve más allá de sus pies.
La trasladan medio dormida al Psiquiatrico.
Una vez llegan al sitio, la Carol ve una gran Mansión. Pero no le parece un Hospital.
En los más profundo de su alma, sabe que algo no funciona.
Y no se atreve a preguntar, no puede. Sus fuerzas se desvanecen.
Los Señores están en una OFICINA, la Carol llega a verlos. Se siente confiada.
Realizan el ingreso.
La Carol, ya dispone de habitación. La siguen acompañando dos hombres de blanco. Sin soltarla. La sujetan con fuerza. Carol no puede dar un paso. Sus pies son arrastrados por el suelo. Con total facilidad. Pues ella es tan poca cosa.
La dejan en una habitación. Cierran la puerta...
Ahí se queda Carol tumbada en la cama.