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viernes, 8 de noviembre de 2019

JOAN Y LUCIA.

Emprenden su vida como pareja en un pueblecito catalán.
Joan, un portentoso payés, y su compañera Lucía; una verdadera luchadora.
Fueron tiempos de mucho trabajo. Comienzos sin beneficios apenas.
Pero su juventud y su energía les arropaba.
Consiguen agrandar su Masía.Contratan a Luis, su Masover.
Los Padres de Rebeca poco a poco flotan en un ambiente lujoso. Su granja va muy bien. Sus economía va creciendo.
Deciden contratar a una chiquita joven para las labores del hogar. Ella será una gran protagonista, de esta novela.
Y así poco a poco la granja llega a tener unos 5 empleados. Cada uno con sus obligaciones, y pocos derechos.
A Luis le ofrecen una pequeña casita junto a la Masía. Los demás empleados no residen en la vivienda; excepto Carolina que tiene el deber de habitar en la casa de los Señores.
Carolina va a tener que aprender rápido. Pues es una gran casa. Y su trabajo será incesable.
Los meses transcurren, el invierno da paso a la primera. Época de trabajo intenso. Y hacía el verano las raíces dan sus frutos.

Las ganancias en la Masía son cuantiosas.

Joan y Lucía, son felices. Deciden que es el momento de formar família.

Antes deberán casarse. Algo necesario en aquellos tiempos. El sacerdote del Pueblo, no con mucho agrado; accede a la petición de los jóvenes.
Eran una pareja algo adelantada a sus tiempos. Las circunstancias así les habían educado.
Una pareja que surge del verdadero sufrimiento. Dos seres con estudios y bien posicionados socialmente. Con una gran rebeldía y con esa garra propia de la juventud.
Así son Joan y Lucía.

jueves, 7 de noviembre de 2019

REBECA Y SUS ORÍGENES.

La família de la niña, se remonta a tiempos realmente difíciles.
Allá por el 1900...

Los Bellver ya casados; deben vivir una guerra mundial. Ellos se conocen en el transcurso de una inevitable catástrofe. El un joven catalán, ella una increíble italiana.
Los dos vivieron en sus carnes la poderosa fuerza de la maldad humana.
En España, se marca la neutralidad. Pero es azotada por otros motivos; económicos, sociales,etc. Las mujeres no tienen ningún tipo de derecho.
Italia; por el contrario definida como una de las potencias ganadoras, se sume en conflictos políticos, que no logrará subsanar. Con lo cual trasciende en el país una dura postguerra.

Esta pareja de payeses; por fin se encuentran por circunstancias vitales en Francia. Entre el Pirineo francés y el catalán. En esa línea fronteriza.
Huyen juntos de sus anteriores vidas, de sus famílias. Y deciden formar su hogar en algún punto de Cataluña. Ya que el Señor tenía tierras en esos confines.
Consiguen aferrarse a las raíces catalanas. Y emprender una vida juntos.
El era un gran payés y ella una gran mujer que sabía defender sus derechos.
Así que juntos lograrían sus objetivos.
Y es aquí donde comienza una historia de Amor entre dos seres fuertes y valientes.


lunes, 4 de noviembre de 2019

PRIMER CAPÍTULO.

Rebeca, esa curiosa niña del aquel pueblecito; situado en lo más alto de las montañas del Pirineo catalán.
Ella nace en una família más o menos acomodada. Payeses, que se dedican al campo, a los animales; a su granja.
La família posee grandes extensiones de tierras, heredades seguramente de sus antepasados. Gente trabajadora y honrada. Payeses y granjeros. Poseen gran experiencia. E incluso llegan a tener personal asalariado que trabaja para ellos.
Esos padres campesinos siempre fueron criados en Cataluña. Como todos los de anteriores generaciones.
No eran trabajadores a cuenta del SEÑOR de la Finca. No, no, eran dueños de sus propiedades.
Con lo cual, Rebeca; poco más o menos nace entre algodones o entre paja. Según se mire. Porque su crianza, tampoco fue de los más maravilloso.
Sabiendo que la novela se ubica en los años 40. Es necesario recordar que estaban en tiempos de postguerra.

domingo, 3 de noviembre de 2019

PERSONAS GENEROSAS.

Doy fé, de que todavía existen almas generosas. Personas con buen corazón... Desinteresadas. Bondadosas. 
De esas que aparecen en tu vida, cuando para nada lo esperas.
Te sorprenden con sus gestos.
Te hacen favores sin pedir nada a cambio. Por el simple hecho de ofrecer felicidad.
En una etapa de vida, en la cual trabajé al lado de Monjas; siempre me dijeron que la Providencia es Divina. Y empecé a creer en ello. Lo cierto es que cada vez estoy más segura. La fuerza que me demuestra esa sabiduría es cierta.
Pasando por alguno de los momentos más difíciles. Aparecen y te preguntas a qué es debido. Pues por Misericordia. Por algo sobrenatural. Por lo que sea, pero están ahí. Y no te dejan hasta conseguir su objetivo. Tu PAZ es su labor.
No quiero describir ejemplos gráficos, simplemente por preservar su intimidad.
Pues intuyo que son seres especiales. Y merecen todo mi respeto. No son personajes, son ángeles.

Llegan hasta mí, por algún motivo. Y no los he buscado, de verdad. Ellos han venido por su propia decisión. Sabiendo que los necesitaba.

Y tienen tanta sencillez, que dudas de sus actos. Te confunden, incluso piensas mal. Por desgracia así nos hemos acostumbrado. Somos incapaces de creer en el ser humano.

Yo ya puedo decir que adoro a los enviados.

Percibí su bondad. Y os aseguro, que aparecen y desaparecen al instante. Seguramente no los vuelva a ver. Aún así me dan alas para seguir confiando en la divinidad.