Seguidores

sábado, 27 de abril de 2019

DERECHO A VIVIR.

Simplemente por haber nacido. Por estar viva; tengo derecho a la vida.
Como no; debo dar gracias a mis PADRES, por haber hecho posible mi derecho.

Qué significado tiene para mí este derecho...

No sólo me otorga vivir dignamente, también me
da derecho a MORIR dignamente.

Puedo profundizar mucho más;  tengo derecho a no ser menospreciada, a no ser manipulada, ni utilizada. Tengo derecho a que de ninguna de las maneras se quiebre mi dignidad.
Nadie ni nada puede ser capaz de vulnerar mis valores, mis decisiones, mi opinión; con respecto a mi intimidad.

Mi libertad, mi seguridad, mi independencia... SON PALABRAS QUE DEFINEN MI AUTOESTIMA.

Por supuesto, tengo derecho a vivir mi vida; mi vida, como más me plazca.

Yo me puedo encargar de elegir cual es mi destino. Supe aprender de mis progenitores los suficiente valores, para  ser capaz de decidir sobre mi bienestar.

Como persona comprometida con la vida. No permitiré que nadie entorpezca mi nivel de estabilidad. No soportaré que me juzguen sin motivos, que duden de  mis palabras. Me respeto, y sé respetar. No voy a permitir que entren en mi vida familiar.
Merezco mi derecho.

No me vas a dar ejemplo. Yo ya he aprendido cual es mi lugar. No me van los juegos, los acertijos, los jeroglíficos.

Yo, tengo un defecto... suelo ir de frente. Afronto mis errores, y desde luego valores mis logros.

No necesito embudo. Puedo escupir con mucha facilidad.

Y ante todo, me dignifico ante la sinceridad, la confianza, el respeto, el AMOR.

Sin caer en torpezas inadecuadas. Que nada me van a aportar.

SUMO.

Y RESTO, cuando algo me daña.

lunes, 22 de abril de 2019

UN PADRE DE FAMÍLIA.

Mi PADRE, persona que se supera constantemente.
Mi PADRE, entregado a sus hijos.
Mi PADRE, sólo él, sabiendo culminar todos los caminos.
Mi PADRE, que se emociona, se ilusiona, se sorprende...
Mi PADRE, que ha sabido ocupar su lugar.
Mi PADRE, que cometió sus errores; como todo ser humano.
Mi PADRE, que aprendió a luchar, a subsistir...

Un emigrante, luchador, vividor. Creció durante sus experiencias fuera de su pueblo natal.
Trabajador como ninguno.
Formó su família.
Se fue superando poco a poco.
Supo amoldarse a los tiempos modernos.
Acepto cada situación novedosa en su vida.
Maduró.
Creció como persona.
Y envejeció.

Y sigue dejando su huella, y sigue reclamando su potestad. Y se deja llevar.
Y se centra en su condicional amor hacía los suyos.
Sin dejar a ninguno desvalido.
Intenta apoyar, sin dejar de entregarse.
Se deja arrastrar, viéndolas venir.
Se deja QUERER.

Intenta llegar a su final, con total dignidad; paciencia, benevolencia, etc.

UN PADRE.

MI PADRE.



domingo, 21 de abril de 2019

PLETÓRICO.

Así tengo mi corazón.
En estos días de vacaciones, he podido disfrutar de mis hijos.
He vuelto a sentir sus palpitaciones.
La unión que en su día  la naturaleza pudo fusionar, vuelve a fluir.
Los latidos de su corazón, que tanto reconozco. Se filtran en los poros de mi piel.
Y se mezclan con mi propio corazón.
El olor, el sentimiento, el puro respirar. Toda una explosión....
Las miradas encontradas, los abrazos, las pocas palabras en un solo gesto.

Un cordón que jamás se podrá romper, jamás.

MIS HIJOS. MI VIDA.

viernes, 19 de abril de 2019

DEVOCIÓN.

Sentir pasión por lo que uno ama.
Entregarse totalmente en cuerpo y alma.
Seguir sin condición; tus ideas, tus emociones, tus sentimientos.
Entrega hasta la rendición por algo en lo que crees.
Mi trabajo como cuidadora, no es una obligación. Es una devoción. Cuando eso lo transmites, se denota tanta energía, felicidad, amor.
Sin embargo, cuando ocurre lo contrario. Es decir; sientes que vas a a trabajar por obligación, por dinero, por interés. También se palpa. Y a la hora de ofrecer tus servicios, la persona a la que tu crees que cuidas, percibe malas vibraciones.
Un profesional se entrega a su USUARIO, para brindarle las mejores expectativas.
Para sanar su físico, su mente, su espíritu. Su ALMA. Para apoyar en todas sus inquietudes, sus necesidades; las más básicas y las más profundas.

Un buen Cuidador debe pasión y AMOR a su trabajo.

De no ser así; nos enfrentamos a un mundo equivocadamente inseguro para nuestros seres mayores.

Empatía, es lo que necesita un cuidador. Siempre pienso, si a ti no te gusta que te hagan esto; a tu usuario tampoco.
Mirate en un futuro no tan lejano, y verás que necesitas. Y sentirás que debes entregar.

Dedicado a todas esas personas que se dedican al cuidado de PERSONAS, con alguna necesidad.