A SOLAS.

 Recargar. Suministrar energía a nuestro cuerpo y alma.

Sentir la necesidad de parar, anhelar calma y paz.

Eso necesito.

En eso me centro en el día de hoy. Si no consigo apaciguar mis ansias, no creo que pueda seguir con esta lucha.

Durante unos días, he conocido a gente maravillosa. Profesionales como la copa de un pino. Personas amables, dedicadas a su oficio. 

Me gustaría nombrar a todas esas personas del HOSPITAL SANTA TECLA, de TARRAGONA.

Desde recepción, pasando por la limpieza, hasta el cirujano

Toda mi situación, no era de lo más agradable. Pero ellos han conseguido que estuviéramos entre algodones.

Enfermeras, auxiliares, médicos. Quiero agradecer su gran labor hacia las personas.

He podido tomar café, bajo control por la pandemia. Estar junto a él. A todas horas, en todo momento.

He sentido el gran calor que fluye de sus corazones.

Cualquier duda, cualquier pregunta, cualquier necesidad. Ha sido cubierta con total entrega y devoción.

QUIERO AGRADECER CON TODA MI ALMA.

A VOSOTROS. TRABAJADORES DE SANTA TECLA.

FELICIDADES Y ENHORABUENA.