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domingo, 17 de marzo de 2019

UN ABRAZO...

Por fin, pude abrazar a una de las pocas personas que más quiero en este mundo.
MI HERMANA CARMEN.
Una gran luchadora, una gran mujer. Una mujer que siempre va de frente. Que nunca te falla. Una grandiosa persona. Una MADRE, una HIJA, una HERMANA.
Una persona que nunca desfallece, y si así sucediera; sacaría fuerzas desde lo más profundo de su gran SER.
Nunca creí que pudiera QUERER tanto a mi HERMANA.
Nunca imaginé, ni siquiera desde bien pequeña que iba a ser mi soporte. Mi energía, mi fuerza.
Y me arrepiento de no haber ido a abrazarla antes. Muchísimo. Dios lo sabe.
Me faltaron esas fuerzas que a ella tanto la definen.
Fui una cobarde. Lo siento tanto. Tenía tanto miedo, tanto...
Ayer cuando puede notar su arrope, supe cuánto la necesito.
Y está hundida, enferma; sin embargo me demostró tanta entereza. Tanto AMOR incondicional.
Con solo un par de abrazos me hizo sentir tan FELIZ.
Transmitió toda su bondad hacia MÍ.

Siempre podré gritar a los cuatro vientos, cuán agradecida estoy por haber podido compartir con mi HERMANA, tanta dicha.

El amparo que me brinda es incalculable.

La PAZ con la que volví a mi casa, no tiene precio.

TE QUIERO HERMANA.

domingo, 10 de marzo de 2019

ARMADURA

Gracias...
Quise despojarme de mi armadura. Lo intenté. Y falló.
Preparada creía estar; y me volví a equivocar.
Me planteé, capaz o no?

Fuí capaz, pero me fallaron.
Siento un gran dolor, inmenso dolor. Porque mi armadura se rompió.
Creí estar preparada para iniciar un nuevo camino. Y no fue así. Me hirieron de muerte.
Lo que peor me sabe, es haber sido vulnerable, débil, indecisa. Creer, confiar y equivocarme de nuevo.
Pensar que estaba en el camino, y no lograr alcanzarlo.
Necesito ser fuerte. Volver a sacar mis armas.
Y realmente me da igual, quién pueda sufrir el derribo.
Pues solo voy a creer en  mi misma.
No me siento con fuerzas de soportar más cobardía.
No quiero meter en mi mochila de la vida más peso.

Creo sinceramente que ya he soportado más de lo debido. Y debo soltar, soltar.

No deseo arrastrar en mi camino, más peso de lo debido.

Pienso solo en mí.

Satisfecha de dar oportunidades. Complacida de no recibir nada a cambio. Entregada según mis principios.

Y feliz por haber aportado poco o mucho de mi entrega.




sábado, 2 de marzo de 2019

CONMIGO MISMA.

Cuanta razón, realmente cuando te sientes plenamente feliz. Dónde se refleja, en la mirada. La expresión de tu cara lo dice todo. Tus ojos miran de forma diferente, enfocan desde otra perspectiva.
Emanas, fluyes, sonríes sin cesar, flotas.
Los demás notan en tu caminar que algo sucede en tu físico. Emocionalmente derrochas alegría.
Tu sabes porqué, tu sientes en tu interior la eterna paz que tu cuerpo necesita.
Incluso te sientes capaz, con más fuerza para alcanzar tus sueños. Es evidente que el estado anímico influye en el bienestar de todo ser humano.
No cabe duda que si te sientes pleno tu salud física también mejora.
Debemos aprovechar esas pequeñas cosas de la vida, que nos ofrece la oportunidad de sentirnos tan bien. Ya sabemos que no es camino de rosas. Pasamos por verdaderas calamidades, esas experiencias que nos llegan. Carreras que solemos andar.
Los pequeños detalles, son los que en realidad nos hacen más felices. Seamos capaces de saber verlos. No andemos con tapujos. Si lo material no nos sirve, busquemos lo esencial.
Yo me siento plena, encantada de ser como soy. De tener lo que poco que tengo. Mi alma se siente dichosa. Mi ser interior me muestra luz.
No puedo pedir más.
Doy GRACIAS.

domingo, 24 de febrero de 2019

REFLEXIONES.

Frente al mar, visualizando las olas. Escuchando la melodía del sonido que emite el agua. Mirando el fondo infinito, lo precioso que resulta dejarte llevar por el azul. Fusionar tu mente con el agua, es como volver a nacer.
Así es como yo intento reflexionar sobre mi vida. Dejar el rencor y la ira aparcados en el fondo del mar. Es mi terapia. Después de realizar este ejercicio, me puedo ir tranquila. LLena de paz. Logro vaciar mi demonio. Y sale a flote toda mi riqueza espiritual.
Si, así es.
Frente al mar.
Visualizando las olas.
Escuchando la melodía.
Mirando el fondo infinito.
Fusionando la mente.
Volviendo a nacer.