Cómo me siento...
DECEPCIONADA.
Qué siento...
Frustación, manipulación, engaño, traición. INJUSTICIA.
Mucho DOLOR e IMPOTENCÍA.
Es lo que me han ofrecido. Ningún cambio, ningún acuerdo. Yo siempre expectante, intentanto el bienestar de mis JEFES. Me han utilizado, exprimido y aprovechado de mi buen hacer. Son personas guiadas por el egoísmo monetario. Sin importar nada más. He ofrecido todo tipo de facilidades. Al pie del cañón.
Su respuesta. DESPIDO.
Dos familiares, con lo que nunca mantuve ningún tipo de trato. Acuden a mi trabajo. Y me despiden. A toda prisa. He de salir escopeteada. Humillada, sin motivo alguno.
Me obligan a firmar conforme recibo unos documentos. Yo añado que no estoy de acuerdo.
Y a partir de ahí...
Acudo al sevicío de URGENCÍAS. Con ataque de ansiedad. La despedida de mis JEFES, fue tan cruel. Intenté suavizar la situación. Les besé en la frente, como siempre. Les tranquilicé. Mientras, lo otros presionaban para que me fuera.
Ocurre el día 3 de enero. Evidentemente les dejo; con todo preparado. Salgo del domicilío como delicuente. Vigiliada, y avergonzada. No por mí, si no por ELLOS.
Los USUARIOS, tienen sus derechos. Su opinión. No encuentro justo, que las famílias tomen el mando. Mientras sean capaces, nadíe tiene ningún derecho a anular sus preferencías.
Mis JEFES, no estaban conformes con las dos nuevas cuidadoras. No se atrevían a echarlas, por respeto. Y a mí, que llevo más de 5 años. Me sacan a patadas.
El dinero no cubre las necesidades básicas. Solo tapa las deficiencias, de los no profesionales.
No debo opinar sobre temas familíares.
Pero debo defender mis derechos, como cuidadora.
UTILIZADA.
ResponderEliminar