KILIAN.

 Tal día como hoy, hace algunos años.

Yo iba dispuesta a darlo todo por ti.

Sabía que no ibas a defraudarme... Era mi segundo parto. Y lo sentí todo tan diferente. Las contracciones no cesaban. Tenía ganas de empujar. No iba a ser un largo proceso. Procuré pasar toda la noche anterior, haciendo el mejor trabajo.  Todo iba rodado. Rompí aguas, y siguiendo en la normalidad... Decidimos llevar a tu hermana Mayor al cole. Todo estaba tan controlado. Tu Padre quería que nos diéramos prisa. Yo estaba segura de que tu llegada sería en el momento oportuno. Sin incomodar, ni apremiar. Estabas haciendo un esfuerzo, por darme toda la seguridad y fuerza. Hicimos un buen equipo. Pudimos organizarnos.

En el corto trayecto hacia el Hospital, supe que no tardarías en llegar.

Legamos a la Vall de Hebró. Recuerdo que habían enfermeras en practicas. Que ni siquiera se atrevían a buscar una vía. Pues me dijeron, que estaba muy a punto. 

Jope Kilian, ya no querías estar dentro. Querías ver el atroz mundo. 

VINO UNA COMADRONA Y UN MÉDICO. CUAL FUE NUESTRA SORPRESA. SEÑORA USTED AGUANTA ESTOS DOLORES...

CLARO ES MI SEGUNDO EMBARAZO. TENGO EXPERIENCIA. PERO SRA, INSISTÍAN USTED YA ESTA DE 7 CENTIMETROS. 

OLE OLE Y OLE.

Le falta nada para parir. Porque ha esperado tanto. Pues yo contesté, he llevado a mi hija Mayor al Cole. He organizado mi casa. Me he duchado. Y he venido. Me preguntaron como pase la ultima noche. Con dolores , como no. Y ya he roto aguas. Que pasa. Yo ya preocupada. 

No pasa nada. Que nos vamos al PARITORIO. Pues me cago, pensé yo. No hay tiempo de nada más. Ni rasurar, ni perilla, ni nada. A PARIR, se ha dicho.

Como con Ely fue más lento. Pensé que tenía tiempo de sobras. Apuré al máximo. No me arrepiento. Pues KILIAN supo poner su tiempo.

Menos mal que TU PADRE, estaba conmigo. No tuvimos tiempo de avisar a nadie. Solo a la Tita Merche para que recogiera a la ELY.

El PAPA me decía, te has pasado. Ahora qué. Y yo pues a tener a mi HIJO...Directamente al Paritorio. A pecho descubierto. Sin ninguna anestesia, ni nada por el estilo. 

HALA AL POTRO. 

Y NOS DEJAN ALLÍ. EMPIEZO A OLER A NARANJAS. SE VAN A COMER. NOS VAN A DEJAR SOLOS.

ME DICEN, ESPERE UN POCO. ENSEGUIDA VOLVEMOS. 

Le digo al PAPA. Llama ya. Voy a parir. Y el sin saber que hacer. Pero me dice, no hay nadie. Y tu, pues esto no espera. Voy a parir. Llama corriendo. Que viene....

Esa es una de tus frases preferidas. QUE VIENE...

Cuando de pronto, acude un montó de gente. Entre especialistas y personal en practicas. Yo alucinaba. Pegué un grito desolador. Pidiendo ayuda.

Se preparó un gran equipo. Me pidieron permiso para tener publico en el parto. Para ver un parto natural. Vamos en vivo y en directo. Yo no tenía tiempo de pensar. Y dije, lo que ustedes quieran. Pero no aguanto más.

Voy a empujar.

No sé si fueron dos o tres empujones, pero hijo mío saliste deslizándote con una vitalidad impresionante. Siempre supe que serías una persona especial.

Lo más curioso. Después de ir todo de maravilla. Los tenía observando mi chichi. Comentando que gran trabajo. Todos aprendiendo. Y yo pues nada. Ni puntos ni nada. Tal cual. Una unión irrepetible. Un corte de cordón impoluto. Se llevaron tu placenta para ayudar en el Hospital. Todo tan sano y hermoso. Por la tarde ya estábamos recibiendo visitas. . Eras tan guapo. Y tan comilón. Que no demoraron en darnos el alta. Para casa con ELY. Estaba mi niña tan impaciente. Tan deseosa de tenernos a su lado. 

Tuvimos mucha suerte. Por eso debemos tener la misma ilusión. 

Siempre adelante.

Gracias por hacerme tan divina, tu llegada.