Una gran PAZ INTERIOR. Un gran sosiego, una gran tranquilidad, me he sentido totalmente relajada, sin estrés, sin prisas, sin obligaciones, sin perjuicios, sin juicios.....
Simplemente en libertad y con toda la calma.
Eso me transmites hermana.
He podido disfrutar de un día junto a TI, a solas.
Nos hemos comunicado especialmente; me he sentido protegida como siempre. He sentido una felicidad que hacía días tenía olvidada.
Un arrope familiar. Eso que necesitamos todos en algún momento.
Y que sólo los que te quieren de verdad saben otorgar.
Y así me he sentido yo querida hermana. AGRACIADA POR TENERTE A MI LADO.
He pasado un gran día, tan tranquila.....
Eso me hacía falta después de una semana fuerte de trabajo. Después de algunas acciones que me desagradan, después de algunas ver cómo algunas personas me defraudan, después de analizar simplemente mi estado de ánimo. Después de sentirme mal física y emocionalmente...
Después de todo eso HERMANA, tu has sido las que ha saciado mi ANSIEDAD.
Y por eso no puedo dejar de agradecerte que te mantengas en mi barco.
Ese barco que en ocasiones va a la deriva, en el cual tu eres mi principal timón, mi vela, mi brújula.
Lo eres TODO PARA MÍ QUERIDA HERMANA.
IDEM.
GRACIAS POR EXISTIR.
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